julio 2014
Natalia ha sido, y es, fuente de inspiración desde que la conozco.
Una mujer pasional, enamorada de la música y la educación y de una sensualidad indudable que brota de su sonrisa y su energía vital.
Cuando hablamos de hacer una sesión de fotos de su embarazo el escenario que más nos sugería eran las extensiones de maizales que todavía inundan la Vega de Granada. Su pelirroja melena contrastaba con las enormes hojas del maíz y las dulces curvas de su embarazo se enmarcaban gracias a las tonalidades de los verdes y tierras de esta vega.
Fue una sesión divertida, en la que Natalia evidencia la sensualidad del cuerpo femenino durante el embarazo y que disfrutamos los tres, Natalia, Andrés y yo.
Gracias a esta maravillosa pareja por confiar en mí para este momento tan importante. Capturar este proceso de la vida con todas sus sensaciones es un gran reto y un enorme placer.